
De la década de los 70 sólo tengo algún que otro recuerdo de infancia, la mayoría de los cuales se refieren a situaciones vividas durante la etapa de EGB en el colegio Santiago Apóstol, un colegio que por muchas razones ha marcado y sigue marcando mi vida.
De los 80 destacaría una adolescencia teñida por la búsqueda incesante de mí mismo y de mi lugar en el mundo, todo ello con un ligero tupé en el pelo y a ritmo de Elvis.
Los 90 tuvieron dos mitades: la primera comprende los años de Telecos, las primeras decepciones en los estudios, los grandes esfuerzos académicos y la consecución del ansiado título. La segunda mitad abarca el trabajo en el Clot, los estudios de Teología, Akwaba, los viajes de cooperación a África, Honduras...
La última década es, sin lugar a dudas, la más importante en mi vida y en la que he vivido los acontecientos más destacados. A nivel profesional destacaría mi paso por el Sant Jaume, el Tecla Sala, y más recientemente la FECC; también los libros y las guías editados con Enciclopedia Catalana y Mac Graw-Hill. A nivel personal, el hecho de formar una familia con Olga y los niños, sin duda mi tesoro más preciado.
Estos cuarenta años están llenos de anécdotas, de personas, de testimonios, de familia y amigos, de objetivos, de sueños, de metas, de éxitos, de fracasos, de viajes, de fe... en definitiva, de vida. Gracias a todos los que formáis o habéis formado parte de mi historia personal a lo largo de estas cuatro décadas. ¿Qué sería de mí sin vosotros?.