Fue una especie de arrebato. El otro día nada más levantarme cogí el primer libro de la trilogía Millennium de Stieg Larsson: "Los hombres que no amaban a las mujeres". Me enganché de tal manera que no paré (excepciones hechas para comer e ir al lavabo) hasta que por la noche lo acabé de leer.
Larsson no tiene la pluma de Ruíz Zafón pero su novela es atractiva, ágil, fácil de leer. Algunos pensaréis que no tienen absolutamente nada que ver pero a mí me recuerda al Pérez Reverte de "La piel del tambor"; el tema de la novela, la violencia física y los abusos cometidos contra las mujeres, me trae a la mente la película "Tesis" de Amenábar; y puestos a buscar más semejanzas inverosímiles diría que el ritmo de la novela me recuerda a "El código da Vinci" de Dan Brown. Quizás he exagerado un poco pero lo cierto es que la novela está bien y ya cuento los días hasta el próximo estreno de la película para ir al cine a verla, espero que esté a su altura.
Ya sabes, si aún no la tienes o la tienes pero no la has leído, ¿a qué estás esperando?. Yo espero disponer de un poco de tiempo para comprarme el segundo volumen ("La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina") y seguir las peripecias del periodista Mikael Blomkvist y la hacker Lisbeth Salander.