Ha vuelto Tarantino y lo ha hecho, como no podía ser de otra manera, con polémica. Su última película, "Malditos bastardos" es una irónica vuelta de tuerca a la historia y, especialmente, al desenlace de la Segunda Guerra Mundial.Sinopsis (filmaffinity.com): "Durante la ocupación alemana de Francia, en la SGM, Shosanna presencia la ejecución de su familia a manos del coronel nazi Hans Landa. Shosanna consigue escapar y huye a París, donde se forja una nueva identidad como dueña y directora de un cine. En otro lugar de Europa, el teniente Aldo Raine organiza un grupo de soldados judíos para tomar represalias contra objetivos concretos. Conocidos por el enemigo como “The Basterds” (Los cabrones), los hombres de Raine se unen a la actriz alemana Bridget Von Hammersmark, una agente secreto que trabaja para los aliados, con el fin de llevar a cabo una misión que hará caer a los líderes del Tercer Reich. El destino quiere que todos se encuentren bajo la marquesina de un cine donde Shosanna espera para vengarse...".
Ya sabemos que Tarantino hace un cine poco convencional, con diálogos largos y llenos de su particular sentido del humor, escenas muy sugerentes, personajes extranvóticos, violencia verbal y física bastante explícita y exagerada... Pues bien, ha vuelto Tarantino en estado puro y eso es lo que supura de la película. Tarantino reescribe la historia a su manera utilizando una situación y unos personajes muy genuinos.
Le reconozco a Tarantino su genialidad pero no me parece una película redonda. Lo mejor, el personaje interpretado por Christoph Waltz. El final del film tiene dos momentos contrapuestos: la secuencia en el cine (extraordinaria) y la rendición del coronel nazi (ridícula). En fin amigos, no se si atreverme a recomendaros ésta película o no. Sólo os diré que si os gustó Pulp fiction podéis ir tranquilos a ver ésta, pero si aquella ya os pareció excesiva mejor cambiáis de película.