Primero fue el Ipad, luego el Iphone 4 y ahora ha sido el Macbook Pro. Lo reconozco, me he vuelto un appleadicto. Todavía no entiendo cómo he tardado tanto en entrar en esta rueda. Asumo que es bastante adictiva y sectaria, y no precisamente barata, pero confieso que estoy encantado de formar parte de la secta de la manzana. En fin, todos tenemos nuestras debilidades, ¿no?.