
Siempre me ha gustado coleccionar cosas: cromos, sellos, monedas, billetes del mundo, cómics... pero la verdad del asunto es que empezaba con muchas ganas y en seguida me cansaba, siendo mi madre la que persistía en el tema (y es posible que aún lo haga). ¿Por qué etiquetas de agua?, supongo que para obligarme a beber agua, dejando la coca-cola, la horchata y otras bebidas muy refrescantes pero menos saludables.
No se cuánto me durará esta nueva pasión, pero sí se que cuento con vosotros para que me ayudéis a hacer una verdadera colección. Ya lo sabéis, cuando bebáis agua acordáos de mí y, con sumo cuidado, despegar la etiqueta. Yo sabré agradecéroslo con un buen vaso de agua. Un abrazo.