domingo, 11 de agosto de 2013

Concarneau bajo la lluvia

Es difícil resistirse a la belleza de la ciudad amurallada de Concarneau. En el centro de la ciudad moderna y rodeada de una de las bahías más bonitas de Bretaña, se halla un pequeño enclave fortificado con caminos de ronda y callejuelas, junto al puerto pesquero y las playas.

El pasado costero y de plaza fuerte de Concarneau se lee en sus gruesas murallas del siglo XIV, completadas por Vauban en el siglo XVII. La intensa vida portuaria está grabada en los más de 200 barcos de pesca que animan los muelles y la subasta.

La ciudad amurallada, la ville-close es uno de los lugares más visitados de Bretaña. Se trata de un islote de 350 m de longitud por 100 m de longitud, que destaca por su atalaya y el cuadrante solar de la entrada. Dos puentecillos abren las puertas de las murallas. La arteria principal es la calle Vauban y está rodeada de casas encantadoras con carteles a tono con la época de la ciudadela. Por los lados nacen calles adoquinadas que se escapan hasta las aberturas que dan al puerto pesquero.

Para nuestra desgracia cuando visitamos Concarneau llovía y hacía un día desapacible. Y encima perdí mi gorra en el puente antes de entrar en la ville-close...!!!